La historia de las matemáticas es una herramienta valiosa para el aprendizaje de esta disciplina. Al utilizar la historia en la enseñanza de las matemáticas, se puede fomentar la curiosidad y el interés de los estudiantes por esta materia. Además, al introducir el enfoque de resolución de problemas, se puede mostrar cómo los conceptos matemáticos han evolucionado a lo largo del tiempo para resolver problemas en diferentes áreas del conocimiento. De esta manera, los estudiantes pueden encontrar significado y relevancia en lo que están aprendiendo y aplicarlo en su vida cotidiana.

Encinales (2015) afirma que: ¨La historia de las ecuaciones cuadráticas, como un ejemplo de llevar la historia de las matemáticas al aula, es apropiada entonces para trabajar desde diferentes perspectivas, logrando así que el estudiante no solo se enfoque en la solución de un determinado problema, sino que además le permita enfrentarse a otros conceptos inmersos en ellas¨ (p. 144). Es decir, si mostramos algo de la historia de las ecuaciones cuadráticas, el tema se podrá abordar desde diferentes enfoques, permitiendo que el estudiante no solo se centre en resolver un problema específico, sino también en comprender otros conceptos que se le relacionen.